Agatha Ruiz de la Prada
De agradecer fue el desfile de Agatha Ruiz de la Prada, para quien no existe el negro en sus diseños. Tras varios desfiles con paletas muy oscuras, Agatha nos trasladó a un ónirico mundo más rockero que nunca.- ESPECIAL CIBELES 2007
De agradecer fue el desfile de Agatha Ruiz de la Prada, para quien no existe el negro en sus diseños. Tras varios desfiles con paletas muy oscuras, Agatha nos trasladó a un ónirico mundo más rockero que nunca.
El arte contemporáneo está de nuevo presente en las creaciones de Aghata Ruiz de la Prada. En esta ocasión ha rendido homenaje a Nicky de Saint Phalle con vestidos multicolores y originales estampados de espirales y formas geométricas.
Como novedad, este año la diseñadora ha presentado su colección para la nieve con la que es imposible pasar desapercibido y con tablas de snowboard al más puro estilo ?gatha. Una vez más, nos ha sorprendido…
Por supuesto no podía faltar la novia, una novia “made in Agatha” con un estilo muy a lo Menina. Con “leggins” metálicos y volumen casi imposible apareció el secreto mejor guardado de la diseñadora. ¿Quién se atreve a sorprender al novio con este modelito?
Las modelos lucían a lo diablesas con diseños muy estudiados y con complementos como guantes y gafas para que no falte nada en la nieve. Por supuesto el omnipresente corazón no deja de palpitar en cada una de las prendas.
Para las tardes, orginales vestidos con volantes y asimétricos dan la nota original al “look”. Como si de un pentagrama se tratase, las notas van subiendo por el cuerpo de la modelo hasta enroscarse en su cuello.
Las parejas unen sus gustos por la moda y Agatha les propone vestir conjuntados. Ella con amplios vestidos de flores y él con cazadora y camisa a juego con el vestido para las frescas tardes de primavera.
En su nueva colección se pudieron ver siluetas que huyen del cuerpo por la parte de abajo, mangas caídas, amplías y rectas, faldas envolventes y, sobre todo, mucho vestido acompañado de leggins.
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