Según la ciencia, vivirás más años si te conviertes en mamá a partir de esta edad

Según nuevas investigaciones, las mujeres que tienen hijos a sus treinta años tienen más probabilidades de vivir por mucho más tiempo. Un estudio publicado en un importante medio médico portugués encontró que las personas de género femenino tienden a vivir más años si se embarazan a una edad más avanzada, y esto es particularmente cierto si esperan su primer hijo.

Los investigadores agruparon los datos de los países europeos y analizaron el tiempo de vida de las mujeres, además de anotar si tenían hijos y la edad en la que tuvieron al primero. También examinaron otros factores que afectarían la esperanza de vida de una mujer. Finalmente, los científicos declararon: 

“Hay varios factores determinantes de la esperanza de vida de las mujeres, y el factor más sorprendente es la edad de las mujeres durante el embarazo, que puede proporcionar evidencia para promover el embarazo a principios de los años 30”.

Aunque las actitudes se han modernizado en las últimas décadas en cuanto a qué edad es mejor tener hijos, sigue habiendo presión sobre la idea de que la fertilidad de una mujer disminuye rápidamente cuando alcanza los treinta años. Sin embargo, muchas de estas investigaciones son obsoletas o han sido probadas como incorrectas gracias a la ciencia moderna.

Según el informe demográfico europeo en 2015, el 53% de todos los nacidos vivos en Inglaterra y Gales eran hijos de madres mayores de treinta años, con una edad media 30,3 años, mientras que dos tercios de los padres (68%) tenían 30 años o más.

En conclusión, el estudio estadístico de la Organización Mundial de la Salud da la palabra final:

“La caída de las tasas de natalidad entre los menores de 30 años y el aumento de las tasas de natalidad en edades más avanzadas reflejan tendencias evidentes desde mediados de la década de 1970 para retrasar la procreación a edades posteriores”.

También lee: ¿Buscas Embarazarte? Consume Estos 5 Alimentos Para Aumentar Tu Fertilidad

actualidadbebecienciaembarazomamamortalidadsalud